Hola ¿Cómo estás? De una manera especial enfrentando los que nos toca vivir como humanidad. Te invito a que juntos descubramos
el amor de Dios, de la mano de la Virgen
María en este año muy especial al celebrar los 400 años de su Aparición en el
Valle de Catamarca y de nuestro Santo Patrono San Roque. Caminemos, entonces, juntos al encuentro de Aquél que es La
Vida.
Para comenzar vamos a hablar con Dios,
orar o rezar es hablar con Dios, nuestro Padre celestial, para alabarle,
agradecerle y pedirle todo aquello que necesitamos. La oración es uno de los
dones que Dios no ha dado, para comunicarnos y sentirnos en paz. Pedimos
especialmente por la situación mundial que estamos viviendo y por la salud de
los enfermos y por aquellos que los cuidan.
Oración:
“San
Roque, que te dedicaste con todo el amor a los enfermos infectados por la
plaga, aunque también la contrajiste, danos paciencia en el sufrimiento y el
dolor. San Roque, protégeme no sólo a mí sino también a mis familiares, amigos y compañeros librándonos de las enfermedades infecciosas.
Mientras
pueda dedicarme a mis hermanos, me propongo ayudarles en sus verdaderas
necesidades, aliviando un poco su sufrimiento. San Roque, bendice a los
médicos, fortalece a las enfermeras y a los asistentes de los hospitales y
defiende a todos de las enfermedades y los peligros. Amén.”